Al cierre de la última sesión regular, los índices bursátiles estadounidenses terminaron en positivo. El S&P 500 subió un 0,58 %, y el Nasdaq 100 ganó un 1,07 %. El industrial Dow Jones aumentó un 0,62 %.

Hoy, los índices asiáticos subieron en vísperas de las negociaciones comerciales entre EE. UU. y China, que se espera tengan lugar este fin de semana. El acuerdo con el Reino Unido generó optimismo respecto a una posible flexibilización de los aranceles y devolvió la confianza en que la administración Trump aún puede encontrar un enfoque adecuado hacia otros países.

Sin embargo, detrás de este optimismo, los expertos señalan varios factores que podrían complicar el proceso de negociación. En primer lugar, las particularidades de la economía británica y sus estrechos lazos con la Unión Europea requieren un enfoque individual que difícilmente sea aplicable a otras grandes economías como China o Alemania. En segundo lugar, la situación política interna en EE. UU. ejerce presión adicional sobre la administración, obligándola a actuar con mayor determinación y, posiblemente, con menos flexibilidad en cuanto a concesiones. Además, las discrepancias dentro de la propia administración Trump respecto a la estrategia de política comercial también pueden dificultar la consecución de compromisos.

Los futuros sobre índices bursátiles de EE. UU. y Europa subieron ligeramente, mientras que el rendimiento de los bonos del Tesoro estadounidense a 10 años descendió ligeramente. El oro interrumpió su caída y subió un 0,3 %.

Es evidente que los inversores están centrados en los resultados de las negociaciones comerciales del fin de semana después de que el presidente Donald Trump afirmara que, en su opinión, las conversaciones podrían generar avances significativos y que China estaría dispuesta a hacer concesiones. "El sentimiento positivo en torno al riesgo, originado por el acuerdo comercial entre el Reino Unido y EE. UU., podría ser puesto a prueba este fin de semana en Suiza", declararon desde Skandinaviska Enskilda Banken AB. "Si las primeras conversaciones entre China y EE. UU. no muestran signos de alejarse de los aranceles astronómicos actuales, lo más probable es que el dólar reanude su caída".

Recordemos que el secretario del Tesoro, Scott Bessent, y el representante comercial de EE. UU., Jamieson Greer, tienen previsto reunirse en Suiza con el viceprimer ministro chino, He Lifeng. Trump declaró que, si las negociaciones resultan exitosas, podría considerar reducir el arancel del 145 % que impuso en abril de este año sobre numerosos productos chinos.

Circulan rumores de que la parte estadounidense se ha fijado como objetivo reducir los aranceles por debajo del 60 % como primer paso, y creen que China podría estar dispuesta a aceptarlo. El progreso durante los dos días de conversaciones programadas podría llevar a que estas reducciones se implementen ya la próxima semana. "Existe un elevado grado de optimismo respecto a que se produzca una reducción de los actuales aranceles destructivos", señalaron en Manulife Investment Management. "Pero no hay que pensar que se logrará una solución rápida y sencilla para las relaciones entre China y EE. UU.".

En cuanto a las materias primas, los precios del petróleo aumentaron, lo que refleja el optimismo respecto al potencial de nuevos acuerdos comerciales con EE. UU.

En cuanto al panorama técnico del S&P500, la principal tarea de los compradores hoy será superar la resistencia más cercana en $5677. Esto contribuiría a un nuevo crecimiento y abriría el camino hacia el nivel de $5692. Otra tarea prioritaria para los toros será mantener el control sobre el nivel de $5715, lo cual reforzaría las posiciones compradoras. En caso de un movimiento bajista debido a una caída en el apetito por el riesgo, los compradores deberán reaccionar en la zona de $5653. Una ruptura rápida empujará el instrumento de vuelta hacia $5630 y abrirá el camino hacia $5608.